Sobre la Renuncia del Papa Benedicto XVI

No esperen ninguna novedad, ninguna aportación relevante; considero que no puedo añadir nada a lo que ya se está diciendo. Pero sí quiero hacer una reflexión accidental que surge con motivo del anuncio, aún caliente, que ha hecho el Papa de su renuncia.

En algún sitio lo he escrito ya, vivimos tiempos de periodismo "declarativo". La información se nutre en gran medida de declaraciones, ante cualquier hecho, la mitad es una cierta información y la otra mitad -o más-, declaraciones de los portavoces de turno.

Con el anuncio del Papa lo volvemos a ver, y vuelvo a comprobar cuan inútil y mal periodismo es este recurso casi siempre. El telediario de TVE1 de hace un rato salió a buscar declaraciones; la Conferencia Episcopal aún no había dicho nada, varios obispos han dicho obviedades, y los políticos... Los omnipresentes políticos... La portavoz del Gobierno ha manifestado -infinitivo por delante- el respeto de manual, lo que es de rigor; pero ¿por qué tienen que preguntar a otras "fuerzas políticas"? Luego pasa lo que pasa, que la portavoz socialista sale con una broma que no lo es, y que el líder comunista se permite hacer en serio una broma.

Lo de Cayo Lara, líder de izquierdas, es particularmente grotesco. Dejando aparte la paradoja de que un comunista quiera dar lecciones de democracia (ya conocemos las "bondades" de las democracias "populares"), se lanza a sermonear en plan feminista y juvenil, algo así como "ya sabemos que el nuevo Papa será un varón algo mayor". ¡Y lo dice él, que no es precisamente una señora joven...!

Registro diferente es el de los corifeos de la burguesía radical en las redes. Sigo a uno en Twitter que es toda una fuente de inspiración. Resumiendo, su sentimiento es: "¡Socorro. Se nos vienen encima toneladas de propaganda vaticana!", y "pide permiso" para ocultarse un tiempo en su agujero. Tentado he estado de dárselo para los restos; pero me he callado.

En fin, voy a terminar con algo positivo, con un análisis sereno aunque rápido, y rescatando este vídeo hecho para la pasada JMJ, porque aún habemus Papam, y porque en marzo tendremos... dos (¡toma del frasco, Carrasco!).