La muerte de Augusto Pinochet llenó portadas y páginas y páginas de prensa y horas y horas de emisión; la muerte de Saparmurat Niazov, dictador de Turcmenistán ha pasado casi inadvertida -salvo para Marta Salazar y unos pocos-; el declive de Castro es contemplado con piadosa preocupación, mientras la consolidación de Chávez en Venezuela está pasando casi de puntillas.
Para los que estén libres de las anteojeras ideológicas que padecen los revolucionarios de salón, cuelgo a continuación este esclarecedor artículo, "Venezuela: Deriva totalitaria", de Gustavo de Arístegui, publicado en La Gaceta de hoy.
Venezuela: Deriva totalitaria
Venezuela: Deriva totalitaria
Gustavo de Arístegui
La Gaceta, 12 de enero de 2007
Llevo años denunciando la deriva totalitaria del régimen de Hugo Chávez Frías, hemos detallado cómo ha ido adaptando la Constitución, las leyes y las principales instituciones del Estado a sus planes y ambiciones. La concentración de poder viene confirmándose desde hace años, la separación de poderes, el Estado de derecho, el imperio de la ley, el pleno respeto y garantía de los derechos y libertades fundamentales, son todos pilares esenciales de la democracia, que en Venezuela dejaron de existir hace ya algunos años. La oposición ha denunciado de manera reiterada que las máquinas electorales smartmatic podían favorecer de manera muy fácil la manipulación de los resultados electorales. Además del posible fraude electoral electrónico, es de justicia denunciar el escandaloso ventajismo de los partidarios del teniente coronel Chávez, que le permitió usar y abusar de las retransmisiones en cadena, amedrentar a sus opositores y amenazar a los medios de comunicación críticos con no renovar sus licencias si continuaban en su línea editorial. ¿Alguien puede de verdad creer en la imparcialidad del Consejo Nacional Electoral para vigilar y organizar las elecciones, si su presidente acaba de ser nombrado vicepresidente de la República en pago a sus inestimables servicios? Verdaderamente escandaloso.
Es verdaderamente sorprendente, por no decir triste y decepcionante, que pocos hayan denunciado en Europa el acoso a tantos periodistas y medios de comunicación, cuyo último y hasta ahora más grave incidente es el ataque brutal a la libertad de expresión (sin la que no hay verdadera democracia, claro que la de Venezuela dejó de serlo desde que los planes totalitarios de Chávez se pusieron en marcha) que supone el cierre de la veterana Radio Caracas Televisión, la decana del país y, junto con otros medios, firmemente comprometida con la democracia y la libertad en ese país. La lista de periodistas perseguidos, acosados, agredidos, amenazados o contra los que se han cometido atentados, es sencillamente interminable. En Venezuela se han producido en los últimos ocho años casi 100.000 muertos entre homicidios y asesinatos. En esa cifra se puede disimular muy fácilmente un asesinato político y responsabilizar al profundo deterioro que ha sufrido la seguridad ciudadana desde que llegó Chávez al Poder en 1999. La lista de presos políticos es imposible de determinar, pues a muchos se les aplica el Código Penal de manera completamente arbitraria, y en consecuencia figuran como delincuentes comunes, cuando en realidad son presos de conciencia. La Agencia Tributaria venezolana el Seniat se ha convertido en otro instrumento de presión. Que no crea el lector que la amenaza consiste en buscar al defraudador y someterlo al chantaje de la inspección y la cárcel si no se pliega, es mucho más burda, se inventan delitos fiscales, se fabrican pruebas y se crea un caso de derecho-fiscal-penal-ficción, en el que la víctima carece de derechos, capacidad para defenderse o incluso de réplica, y puede dar con sus huesos en la cárcel, pagando una multa inhabilitante o con sus bienes confiscados.
Los periódicos de la semana informaban poco de la designación del nuevo Gabinete de Chávez; en España pocos medios se hicieron eco del grave síntoma de parcialidad del Poder Electoral que suponía el nombramiento de su presidente como vicepresidente de la República. Casi todos se han centrado en las nacionalizaciones, que han provocado el desplome de la bolsa venezolana, que no lo duden, era uno de los objetivos de la ya no tan incipiente dictadura populista, pues, cuanto más débiles se encuentren las empresas, más fácil será controlarlas y someter a los empresarios, espantar a los inversores internacionales, controlar las empresas más importantes del país y arruinar la economía, para que todo el mundo dependa del monocultivo del petróleo y sea así más fácil controlar a un país que ha demostrado a lo largo de su historia ser rabiosamente celoso de su libertad. Venezuela es un país grande, rico y bastante poblado, con una clase media que fue en tiempos la columna vertebral de la democracia venezolana y que hoy es cada vez más raquítica por el empobrecimiento de amplias capas de esa ya casi inexistente clase media, lo que ha facilitado enormemente el proyecto de poder total en el que Chávez se embarcó en 1999.
OTRA cuestión importante es la creación de las milicias populares que sólo dependen y responden ante el presidente, y son más un calco de las SS nazis que otra cosa. No hay que olvidar la creación de un nuevo partido único que aglutina a todos los movimientos y partidos integrados en el MVR (Movimiento Quinta República), así como los demás partidos aliados del régimen. El partido nace con vocación de ser partido único y en consecuencia de primero limitar y luego seguramente prohibir los partidos de oposición.
Chávez no se conforma con dominar dictatorialmente su país, ha intervenido, más cabría decir interferido, de manera intensa e indisimulada en los asuntos internos de numerosos países de la región, pagando las campañas de los candidatos que él consideraba más afines ideológicamente, si bien tendríamos que matizar lo de ideológico, pues, como dice el ilustre profesor y analista de la izquierda chilena Patricio Navia, el populismo y Chávez no son de izquierdas, y desde luego no pertenecen ni por casualidad a la izquierda democrática. Lo que ocurre en Venezuela es una verdadera tragedia que traerá consecuencias muy graves para todos, pues Chávez se ha embarcado en la alianza antisistema y antidemocrática, convirtiéndose en un personaje de culto entre islamistas radicales y extremistas de todo pelaje.
Para los que estén libres de las anteojeras ideológicas que padecen los revolucionarios de salón, cuelgo a continuación este esclarecedor artículo, "Venezuela: Deriva totalitaria", de Gustavo de Arístegui, publicado en La Gaceta de hoy.
Venezuela: Deriva totalitaria
Venezuela: Deriva totalitaria
Gustavo de Arístegui
La Gaceta, 12 de enero de 2007
Llevo años denunciando la deriva totalitaria del régimen de Hugo Chávez Frías, hemos detallado cómo ha ido adaptando la Constitución, las leyes y las principales instituciones del Estado a sus planes y ambiciones. La concentración de poder viene confirmándose desde hace años, la separación de poderes, el Estado de derecho, el imperio de la ley, el pleno respeto y garantía de los derechos y libertades fundamentales, son todos pilares esenciales de la democracia, que en Venezuela dejaron de existir hace ya algunos años. La oposición ha denunciado de manera reiterada que las máquinas electorales smartmatic podían favorecer de manera muy fácil la manipulación de los resultados electorales. Además del posible fraude electoral electrónico, es de justicia denunciar el escandaloso ventajismo de los partidarios del teniente coronel Chávez, que le permitió usar y abusar de las retransmisiones en cadena, amedrentar a sus opositores y amenazar a los medios de comunicación críticos con no renovar sus licencias si continuaban en su línea editorial. ¿Alguien puede de verdad creer en la imparcialidad del Consejo Nacional Electoral para vigilar y organizar las elecciones, si su presidente acaba de ser nombrado vicepresidente de la República en pago a sus inestimables servicios? Verdaderamente escandaloso.
Es verdaderamente sorprendente, por no decir triste y decepcionante, que pocos hayan denunciado en Europa el acoso a tantos periodistas y medios de comunicación, cuyo último y hasta ahora más grave incidente es el ataque brutal a la libertad de expresión (sin la que no hay verdadera democracia, claro que la de Venezuela dejó de serlo desde que los planes totalitarios de Chávez se pusieron en marcha) que supone el cierre de la veterana Radio Caracas Televisión, la decana del país y, junto con otros medios, firmemente comprometida con la democracia y la libertad en ese país. La lista de periodistas perseguidos, acosados, agredidos, amenazados o contra los que se han cometido atentados, es sencillamente interminable. En Venezuela se han producido en los últimos ocho años casi 100.000 muertos entre homicidios y asesinatos. En esa cifra se puede disimular muy fácilmente un asesinato político y responsabilizar al profundo deterioro que ha sufrido la seguridad ciudadana desde que llegó Chávez al Poder en 1999. La lista de presos políticos es imposible de determinar, pues a muchos se les aplica el Código Penal de manera completamente arbitraria, y en consecuencia figuran como delincuentes comunes, cuando en realidad son presos de conciencia. La Agencia Tributaria venezolana el Seniat se ha convertido en otro instrumento de presión. Que no crea el lector que la amenaza consiste en buscar al defraudador y someterlo al chantaje de la inspección y la cárcel si no se pliega, es mucho más burda, se inventan delitos fiscales, se fabrican pruebas y se crea un caso de derecho-fiscal-penal-ficción, en el que la víctima carece de derechos, capacidad para defenderse o incluso de réplica, y puede dar con sus huesos en la cárcel, pagando una multa inhabilitante o con sus bienes confiscados.
Los periódicos de la semana informaban poco de la designación del nuevo Gabinete de Chávez; en España pocos medios se hicieron eco del grave síntoma de parcialidad del Poder Electoral que suponía el nombramiento de su presidente como vicepresidente de la República. Casi todos se han centrado en las nacionalizaciones, que han provocado el desplome de la bolsa venezolana, que no lo duden, era uno de los objetivos de la ya no tan incipiente dictadura populista, pues, cuanto más débiles se encuentren las empresas, más fácil será controlarlas y someter a los empresarios, espantar a los inversores internacionales, controlar las empresas más importantes del país y arruinar la economía, para que todo el mundo dependa del monocultivo del petróleo y sea así más fácil controlar a un país que ha demostrado a lo largo de su historia ser rabiosamente celoso de su libertad. Venezuela es un país grande, rico y bastante poblado, con una clase media que fue en tiempos la columna vertebral de la democracia venezolana y que hoy es cada vez más raquítica por el empobrecimiento de amplias capas de esa ya casi inexistente clase media, lo que ha facilitado enormemente el proyecto de poder total en el que Chávez se embarcó en 1999.
OTRA cuestión importante es la creación de las milicias populares que sólo dependen y responden ante el presidente, y son más un calco de las SS nazis que otra cosa. No hay que olvidar la creación de un nuevo partido único que aglutina a todos los movimientos y partidos integrados en el MVR (Movimiento Quinta República), así como los demás partidos aliados del régimen. El partido nace con vocación de ser partido único y en consecuencia de primero limitar y luego seguramente prohibir los partidos de oposición.
Chávez no se conforma con dominar dictatorialmente su país, ha intervenido, más cabría decir interferido, de manera intensa e indisimulada en los asuntos internos de numerosos países de la región, pagando las campañas de los candidatos que él consideraba más afines ideológicamente, si bien tendríamos que matizar lo de ideológico, pues, como dice el ilustre profesor y analista de la izquierda chilena Patricio Navia, el populismo y Chávez no son de izquierdas, y desde luego no pertenecen ni por casualidad a la izquierda democrática. Lo que ocurre en Venezuela es una verdadera tragedia que traerá consecuencias muy graves para todos, pues Chávez se ha embarcado en la alianza antisistema y antidemocrática, convirtiéndose en un personaje de culto entre islamistas radicales y extremistas de todo pelaje.
Comentarios
Mi amigo Diego Goldman nos regaló un artículo para Planisferio, respecto el coronel Chávez, a ver qué me dices...
El link:
http://elplanisferio.blogspot.com/2007/01/cunto-dura-el-experimento-bolivariano.html
Por esoesto debe cambiar, los pobres, quienes somos los que sentimos en carne propia la degeneracion de la sociedad ESTAMOS CAMBIANDO LAS COSAS, y defenderemos el proceso de cmbio a oda costa, somos muy Tercos chauuuuu
Sin embargo, pienso que la economía libre de mercado, convenientemente matizada según las necesidades concretas de cada país, matizaciones que debería aplicar una clase dirigente con sentido social y patriótico, es la mejor vía de crear una amplia y sólida clase media y de ir extendiendo los beneficios del desarrollo capilarmente. Mucho me temo que el socialismo populista de Chávez sólo va a traer más pobreza aún, la historia está plagada de ejemplos dramáticos.
Un último apunte, no conviene hacer demasiado caso de la ONU, eso de que no cabemos en este planeta es una mentira cruel, y una mentira de ricos para limitar el número de pobres a base de quitarlos de enmedio. Tengo mucha confianza en los recursos del hombre.
Saludos.
Sinceramente Chavez quiere y tiene algunas ideas buenas pero lo realiza de forma erronea y torpe cegado por su idiologia y ademas desactualizado, soñando con una nueva tierra bipolar con el como mandatario de la "comunista" (Marx estaria abergonzado de tal interpretacion de sus ideas).
Soy de Costa Rica aqui el reformismo ayudo mucho a las personas(defendiendo al trabajador con las llamadas "garantias laborales"), no somos ricos pero creo q al no ser esto lo mas importante se vive en armonia, hay muchas cosas con las q no estoy de acuerdo en la democracia, para lo cual (pienso) q se deben actuar de inmediato a cambiar pero de una forma inteligente y cauteloza para que no hiera a la fragil forma de gobierno mundial actual.
Mi idiologia es la paz y libertad, muchas gracias Freth Arguedas Quirós- 16 años- Heredia, Costa Rica// freth_arg_q@hotmail.com
La libertad es una condición para la paz, y Chávez parece querer coger el atajo de la falta de libertad para resolver los problemas de modo dictatorial. Este atajo siempre lleva al precipicio.
Tenemos que seguir buscando fórmulas y medios de aplicarlas para resolver los problemas; el comunismo es una fórmula ya probada y fracasada, en mi opinión, el mayor fracaso de la historia.
Un saludo.
A todo esto agreguémosle la decadencia moral y administrativa de los funcionarios públicos, ejemplo que ha seguido el común de la población. Los funcionarios roban, el pueblo roba. Los funcionarios son anárquicos, el pueblo también. Los funcionarios son más chavistas que Chávez pero no practican lo que gritan en las marchas, pues el pueblo también. Todas son una gran mentira.
Ah! Pero la oposición es tan indigna de credibilidad como los chavistas. La corrupción que imperó en los años de la Cuarta República acabó con la fe que el pueblo les tenía y por su culpa hoy Chávez está en el poder, entonces ¡¡¿De qué se quejan?!!
Pero, hablando la verdad. Analicemos la situación mundial y veremos un mundo dividido políticamente. Ya la hegemonía norteamericana con todas sus atrocidades ha quedado al descubierto. Al mismo tiempo, cada vez más países, por pequeños que sean, están reclamando autonomía y la igualdad social.
También debemos agregar el fenómeno de que a pesar de los adelantos en la ciencia y la tecnología, hay cada vez más depravación moral y deshumanización.
Hoy día a un soldado que mata más enemigos se le llama héroe, a la mujer que aborta porque salió preñada por accidente se dice que es responsable de su cuerpo, al que escoge una forma de vida contraria a la natural se dice que es un modo de vida alternativo, al comediante que se ha hecho millonario por hacer chistes inmorales y hasta burlarse de Dios se le gratifica con premios internacionales, a la superestrella del cine que vive entre drogas e inmoralidad se le dice excéntrica... en fin... esto no tiene remedio, al menos por medios humanos. Sin embargo, la Biblia promete que todo esto tendría que suceder antes de que el gobierno de Dios tomara acción sobre los asuntos terretres. No para quemar la tierra, sino para restaurarla a la perfección con que la hizo y para devolverle al ser humano la dignidad de ser su máxima creación.
Soy estudiante de la Biblia, miembro de los que mundialmente se conocen como Testigos de Jehová, vivo en Venezuela, estado Apure y solo me alegra ver que lo que está ocurriendo en todo el planeta es el preludio al cumplimiento de las palabras de Jesús: "...Venga tu reino, efectúese tu voluntad,como en el cielo,también sobre la tierra" (Mat. 6:10) ¡¡Y sí que hace falta que venga pronto!!
En cuanto a la solución..., procura no hacer una lectura excesivamente literal de la Biblia, Dios no vendrá a resolver esto, porque nos ha hecho libres y lo respeta hasta el final: tendremos que seguir trabajando nosotros -aunque Dios nos ayuda, desde luego-.
Sobre esto, quizá te interese conocer la exégesis católica, que lleva muchos siglos estudiando la Biblia con gran seriedad y -según creo- la asistencia divina.
Pero en mi opinión, la democracia está más en el ejercicio del poder que en cómo se llega al poder; las dos cosas son necesarias para una auténtica democracia, y el ejercicio del poder de Chávez, en muchísimos aspectos, es característico de las dictaduras populistas, incluso de las más caricaturescas.