Está llegando el día que los que vamos contra corriente esperamos, ese punto de inflexión de la espiral del silencio que consiste en que el discurso dominante se petrifica y se vuelve incapaz de argumentar por falta de debate. Es el momento de que nosotros, los outsiders, empecemos a hacer mella de verdad en la opinión pública, porque el ostracismo y la marginación nos ha obligado a pensar, a argumentar, a buscar los resquicios; en definitiva, nos ha hecho fuertes, sugerentes, rompedores o, sencillamente, mostradores de la evidencia.
La libertad de educación es uno de mis campos favoritos de acción. No hace mucho hice un resumen de mis planteamientos. Hoy, acabo de escribir una carta a la directora del diario Granada Hoy, porque, aunque es domingo y todo eso, los tópicos congelados de la política me provocan, me recuerdan ese principio de la comunicación de que hay que evitar el "interlocutor ausente", y porque el partido de pádel de esta mañana me ha reactivado. Aquí la carta:
A vueltas con la enseñanza diferenciada
Leo esta mañana la interesante entrevista a la Delegada en Granada de las consejerías de Educación, Cultura y Deporte, Ana Gámez, y me encuentro con el rutinario discurso oficial, al menos en alguna cuestión, como por ejemplo, la financiación de la escuela diferenciada (en neolengua, segregada). Dice la Delegada que puede haber enseñanza segregada; pero que el que la quiera que se la pague y no sea financiada con dinero público. Pues resulta que el que la quiere ya la paga, porque el dinero público no sale de las arcas del Estado, sale de nuestros bolsillos vía impuestos. ¿Por qué quien quiere un tipo de enseñanza distinto tiene que pagarla dos veces, una vía impuestos y otra directamente? ¿Por qué tiene que pagar una plaza pública, que no va a usar y que es más cara, y luego la privada, que es, además, más barata; pero sobre todo, la que ha elegido libremente?
¿Cuándo se dará cuenta la señora Delegada de que toda la educación, pública y privada, es su responsabilidad? Quitando los conciertos, a quien perjudica es a los que no tenemos dinero para pagar el doble por elegir; y ¡ojo!, en Andalucía, los doce centros diferenciados a los que amenaza con no renovar los conciertos, ¡los doce! Son centros elegidos por familias de barrios obreros y de trabajadores del medio rural. ¿A quién defienden su gobierno y su partido?
Nota para el resto del Mundo: Gámez es delegada del gobierno autonómico de la Junta de Andalucía, gobernada por una colación de socialistas y comunistas. Su partido es el Partido Socialista Obrero Español.
La libertad de educación es uno de mis campos favoritos de acción. No hace mucho hice un resumen de mis planteamientos. Hoy, acabo de escribir una carta a la directora del diario Granada Hoy, porque, aunque es domingo y todo eso, los tópicos congelados de la política me provocan, me recuerdan ese principio de la comunicación de que hay que evitar el "interlocutor ausente", y porque el partido de pádel de esta mañana me ha reactivado. Aquí la carta:
A vueltas con la enseñanza diferenciada
Leo esta mañana la interesante entrevista a la Delegada en Granada de las consejerías de Educación, Cultura y Deporte, Ana Gámez, y me encuentro con el rutinario discurso oficial, al menos en alguna cuestión, como por ejemplo, la financiación de la escuela diferenciada (en neolengua, segregada). Dice la Delegada que puede haber enseñanza segregada; pero que el que la quiera que se la pague y no sea financiada con dinero público. Pues resulta que el que la quiere ya la paga, porque el dinero público no sale de las arcas del Estado, sale de nuestros bolsillos vía impuestos. ¿Por qué quien quiere un tipo de enseñanza distinto tiene que pagarla dos veces, una vía impuestos y otra directamente? ¿Por qué tiene que pagar una plaza pública, que no va a usar y que es más cara, y luego la privada, que es, además, más barata; pero sobre todo, la que ha elegido libremente?
¿Cuándo se dará cuenta la señora Delegada de que toda la educación, pública y privada, es su responsabilidad? Quitando los conciertos, a quien perjudica es a los que no tenemos dinero para pagar el doble por elegir; y ¡ojo!, en Andalucía, los doce centros diferenciados a los que amenaza con no renovar los conciertos, ¡los doce! Son centros elegidos por familias de barrios obreros y de trabajadores del medio rural. ¿A quién defienden su gobierno y su partido?
Nota para el resto del Mundo: Gámez es delegada del gobierno autonómico de la Junta de Andalucía, gobernada por una colación de socialistas y comunistas. Su partido es el Partido Socialista Obrero Español.
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